El padecimiento constituye la tercera causa de muerte en Mexico y la cuarta en frecuencia por cáncer en todo el mundo.
Actualmente el IMSS investiga las mutaciones genéticas que predisponen al desarrollo del cáncer gástrico, para establecer programas de detección de portadores y reducir la incidencia de esta grave enfermedad.
La investigadora del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señaló que el género masculino, junto con la edad mayor a 60 años, alimentos ricos en sal, el alcohol y el tabaco, son importantes predisponentes para el desarrollo de cáncer gástrico.
La experta de la división de Genética del Centro de Investigación Biomédica de Occidente (CIBO) del IMSS, enfatizó que este padecimiento constituye la tercera causa de muerte en México y la cuarta en frecuencia por cáncer en todo el mundo. Detalló que actualmente trabaja en un proyecto en torno al cáncer gástrico que ha derivado en diferentes líneas, una de ellas enfocada a buscar las mutaciones o combinaciones genéticas responsables de esta enfermedad para, una vez establecido esto, instaurar un programa de detección de portadores y reducir su incidencia.
“Si bien México como el resto de América Latina no tiene una frecuencia tan alta de cáncer gástrico como Japón, China y Corea, sí constituye un importante motivo de morbilidad y muerte”, expuso.
Refirió que en el censo en torno al cáncer gástrico, realizado en 2008, establece que su incidencia mundial en ese momento fue de 989 mil 600 casos, en tanto que en ese mismo año, se tradujo en 738 mil decesos.
“Con esto el cáncer gástrico se constituye en la tercer neoplasia en frecuencia y la cuarta en mortalidad por cáncer en todo el orbe”, reiteró.
En México, por su parte, el cáncer gástrico con una tasa de 4.8 por 100 mil habitantes, es la novena causa de egresos hospitalarios, pero en mortalidad, como en el resto del mundo, es el segundo motivo de fallecimientos por cáncer con una tasa de 5.2 por 100 mil habitantes. Indicó que la investigación en la que actualmente trabaja, se incluyen 100 personas, todas con diagnóstico de cáncer gástrico en sus variantes difusa e intestinal.
En la primera, dijo, como su nombre lo indica, la enfermedad se disemina por todo el tejido estomacal, mientras que en la intestinal, se forma una lesión de tipo ulceroso muy localizada.
Actualmente la investigación se encuentra en fase de análisis, producto de los cuales se puede determinar que los alimentos ricos en sal, como el caso de los embutidos (jamón, salchicha, etc.) o los conservados en salmuera, así como los que se cocinan a las brasas o al carbón, condicionan la aparición de cáncer gástrico.
Por otro lado, la Helicobacter pylori, bacteria de la que hasta el 80 por ciento de la población es portadora, tiene algunas variantes estrechamente relacionadas con cáncer gástrico. Por ello, manifestó, la importancia de que ante síntomas de gastritis como ardor en la ‘boca del estómago’, mala digestión, entre otros, se aconseje un análisis exhaustivo por parte del gastroenterólogo, que incluya la práctica de una endoscopía gástrica.